'Reprogramando' las células inmunes para atacar los tumores cancerosos
Las células cancerosas pueden ser objetivos traicioneros tanto para los agentes terapéuticos como para la línea de defensa natural del cuerpo: el sistema inmunológico. Pero un nuevo enfoque para "recablear" los macrófagos, los patógenos del cuerpo y los comedores de desechos, podría ofrecer un nuevo impulso a la inmunoterapia contra el cáncer.
Los investigadores están desarrollando una estrategia para "armar" contra el cáncer a los "comedores de desechos" del sistema inmunológico.La inmunoterapia es un tipo de tratamiento que se enfoca en estimular la propia respuesta inmune del cuerpo contra los tumores cancerosos.
Este tipo de terapia se ha vuelto más popular en los últimos años, y los investigadores han convertido en una prioridad comprender mejor cómo las células cancerosas y las células inmunes especializadas interactúan entre sí.
En un nuevo estudio, un equipo de investigadores del Abramson Cancer Center de la Universidad de Pensilvania en Filadelfia, PA, investigó cómo "estimular" los macrófagos para que ataquen las células cancerosas.
Los macrófagos son glóbulos blancos que forman parte del sistema inmunológico y cuya función es "comer" partículas extrañas potencialmente dañinas, así como limpiar los restos celulares.
Las células cancerosas, explican los investigadores, normalmente se protegen contra estas células inmunitarias enviándoles una señal que se traduce como "no me comas" a través de una proteína llamada CD47.
En la investigación actual, cuyos hallazgos aparecen en la revista. Inmunología de la naturaleza - el equipo encontró una forma de "recablear" los macrófagos para que ignoraran la señal de "no me comas" de CD47 y comenzaran a atacar los tumores cancerosos.
"Preparar" las células inmunitarias contra el cáncer
Los investigadores explican que el simple hecho de bloquear las señales de "no me comas" que transmiten los tumores cancerosos no siempre lleva a los macrófagos a montar su ataque.
Por esta razón, utilizando un modelo de ratón, el equipo probó un método para activar y "preparar" estas células inmunes para atacar los tumores.
“Resulta que los macrófagos deben prepararse antes de que puedan comenzar a trabajar, lo que explica por qué los tumores sólidos pueden resistir el tratamiento con inhibidores de CD47 solamente”, señala el autor principal del estudio, el Dr. Gregory Beatty.
En sus modelos de ratón, los investigadores utilizaron CpG, un tipo de molécula de ADN sintético corto, monocatenario que funciona como un estimulante de la respuesta inmune antitumoral para activar los macrófagos.
Después de esta intervención, los investigadores encontraron que los ratones con macrófagos activados por CpG experimentaron una rápida reducción del tumor y tenían tasas de supervivencia más largas.
El equipo esperaba que, además de la activación inicial de CpG, los macrófagos también requerirían un "ayudante" secundario, como un inhibidor de CD47, para permitirles "comer" eficazmente las células cancerosas.
Sin embargo, se sorprendieron al ver que incluso cuando las células cancerosas expresaban altos niveles de CD47, los macrófagos que habían activado eran capaces de "ignorar" la fuerte señal de "no me comas" y atacar los tumores.
"Se necesita un cambio en el metabolismo"
Para comprender por qué sucedió esto, el Dr. Beatty y su equipo analizaron el metabolismo de los macrófagos después de la activación. Notaron que la actividad metabólica de estas células inmunes había cambiado y que los macrófagos dependían tanto de la glutamina (un aminoácido) como de la glucosa (un azúcar simple) para sus necesidades energéticas.
Los investigadores creen que fue este cambio el que permitió a los macrófagos lidiar con las células cancerosas de manera efectiva.
"El cáncer no se encoge sin la ayuda de los macrófagos y los macrófagos necesitan el combustible adecuado para comer las células cancerosas y encoger los tumores", señala el Dr. Jason Mingen Liu, autor principal del estudio.
“Para hacer esto, se necesita un cambio en el metabolismo para dirigir la energía en la dirección correcta. Es el metabolismo lo que finalmente permite a los macrófagos anular las señales que les dicen que no hagan su trabajo ".
Dr. Jason Mingen Liu
Los doctores Beatty, Mingen Liu y su equipo sugieren que los investigadores ahora deben trabajar más en torno a los macrófagos y su metabolismo. Explican que numerosos fármacos que la medicina utiliza actualmente en el tratamiento de la diabetes y las enfermedades cardiovasculares, por ejemplo, pueden afectar la actividad metabólica de estas células. Sin embargo, no está claro cómo estas interacciones podrían afectar los resultados de la inmunoterapia contra el cáncer.