¿Podría el veneno de ornitorrinco ayudar a tratar la diabetes?
Con la diabetes que actualmente está arrasando en los Estados Unidos, el diseño de tratamientos más efectivos es primordial. Una nueva investigación encuentra una fuente bastante sorprendente de una nueva droga potencial: el veneno del ornitorrinco.
Mientras profundizamos en la biología del ornitorrinco, las sorpresas esperan a cada paso.El ornitorrinco es posiblemente el animal más emblemático y extraño de Australia.
Está clasificado como monotrema, que es un grupo de mamíferos que incluye solo cinco especies supervivientes.
Tiene pelaje pero pone huevos y produce leche pero no tiene pezones, y es uno de los pocos mamíferos venenosos.
Durante la temporada de reproducción, los ornitorrincos machos producen veneno que puede inyectarse en machos rivales, depredadores o humanos curiosos usando un espolón en sus patas traseras.
Aunque no es fatal para los humanos, las secuelas de una picadura de ornitorrinco pueden ser insoportablemente dolorosas.
El genoma del ornitorrinco y la diabetes
En 2008, los investigadores secuenciaron por primera vez el genoma del ornitorrinco. Uno de los investigadores involucrados en ese proyecto, el profesor Frank Grutzner, de la Universidad de Adelaide en Australia, ahora está buscando nuevas formas de utilizar este conocimiento para ayudar a tratar la diabetes.
A las personas que tienen diabetes a veces se les receta un medicamento llamado exenatida. Este compuesto es una versión modificada de la hormona péptido 1 similar al glucagón (GLP-1), que se secreta naturalmente en el intestino y estimula la liberación de insulina. Esto tiene el efecto de reducir el nivel de glucosa potencialmente dañina en la sangre.
El GLP-1 también se encuentra en animales, incluido el ornitorrinco. Sin embargo, la versión del ornitorrinco se modifica significativamente. Como dijo el Prof.Grutzner dice: "Uno de los descubrimientos más sorprendentes del proyecto del genoma del ornitorrinco fue la pérdida masiva de genes importantes para la digestión y el control metabólico; estos animales básicamente carecen de un estómago funcional".
“Más recientemente”, agrega, “descubrimos que el monotrema GLP-1 ha cambiado radicalmente en estos animales, debido a su función dual tanto en el intestino como en el veneno”.
Una diferencia clave entre el ornitorrinco y el GLP-1 humano es su resistencia a la degradación. En otras palabras, tiene el potencial de permanecer en el cuerpo y continuar funcionando durante más tiempo que la versión humana.
“Quizás este animal australiano icónico sea la respuesta a una opción de manejo más eficaz y segura para las enfermedades metabólicas, incluida la diabetes”.
Prof. Frank Grutzner
Los hallazgos han despertado el interés de la industria farmacéutica; los nuevos medicamentos para la diabetes pueden ser lucrativos. Los investigadores involucrados en este proyecto recibieron recientemente un importante impulso financiero de la Red de Salud Local de Adelaida Central, que les ayudará a continuar con su trabajo.
Si bien queda mucha investigación y desarrollo por hacer, los científicos tienen grandes esperanzas. Creen que el ornitorrinco GLP-1 podría algún día ofrecer un fármaco de mayor duración para su uso en una enfermedad que ya afecta a más de 400 millones de personas en todo el mundo.
¿Podría un mamífero venenoso que pone huevos ayudar en este problema mundial?