¿Qué causa un conducto lagrimal bloqueado en los bebés?
Los conductos lagrimales bloqueados son comunes entre los bebés. La mayoría de los conductos lagrimales bloqueados mejorarán por sí solos y otros generalmente responderán bien al tratamiento.
La Academia Estadounidense de Oftalmología informa que hasta el 20 por ciento de los bebés nacen con un conducto lagrimal bloqueado, lo que también se denomina obstrucción nasolagrimal.
Las lágrimas provienen de las glándulas lagrimales, que se encuentran sobre los ojos de una persona en el lado más alejado de la nariz. Las lágrimas drenan a través de los conductos lagrimales hacia la nariz. Pueden desarrollarse obstrucciones en los conductos lagrimales y evitar que las lágrimas drenen normalmente.
Las lágrimas juegan un papel importante en la visión de las personas. Ayudan a mantener la salud de los ojos manteniéndolos húmedos y proporcionándoles oxígeno. También protegen los ojos recubriendo su superficie con antibióticos naturales y eliminando las sustancias irritantes o nocivas.
Síntomas de un conducto lagrimal bloqueado en un bebé
Los conductos lagrimales bloqueados normalmente mejoran sin tratamiento.Según los principales oftalmólogos, los conductos lagrimales bloqueados son el trastorno más común del sistema de conductos lagrimales en los bebés.
Los bebés con esta afección generalmente mostrarán los siguientes signos:
- lagrimeo, que empeora en condiciones de frío o viento o si el bebé tiene un resfriado
- lagrimeo excesivo de los ojos o epífora
- secreción de los ojos, también conocida como materia o reum, que puede ser aguada o una combinación de moco y pus, según la ubicación del bloqueo
- La presión en las esquinas internas de los párpados inferiores puede aumentar la secreción.
- los conductos lagrimales bloqueados afectan a ambos ojos aproximadamente el 30 por ciento de las veces
Estos signos pueden comenzar a mostrarse cuando el bebé tiene 3 semanas de edad.
A pesar de que sus ojos pueden estar llenos de lágrimas, un conducto lagrimal bloqueado no suele causar muchas molestias al bebé. Si un bebé con lagrimeo y secreción ocular parece sentirse incómodo, lo mejor es llevarlo al médico.
¿Cuales son las causas?
La causa más común de un conducto lagrimal bloqueado en un bebé es un sistema de conductos lagrimales que se ha desarrollado solo parcialmente.
Esto puede provocar los siguientes problemas:
- la válvula al final del conducto lagrimal no se abre correctamente
- las aberturas de los párpados (punta) por las que suelen fluir las lágrimas no se han desarrollado correctamente
- los conductos lagrimales son demasiado estrechos
Causas menos comunes
Las siguientes causas de obstrucción del conducto lagrimal en un bebé son menos comunes:
- infecciones que causan hinchazón en la cara, lo que ejerce demasiada presión sobre los conductos lagrimales
- el hueso nasal bloquea el camino que las lágrimas normalmente seguirían hacia la nariz
- pólipos nasales
- quistes o tumores
- lesión de los conductos lagrimales
Diagnóstico
La Asociación Americana de Optometría recomienda un examen ocular completo a los 6 meses.Los síntomas de un conducto lagrimal bloqueado en un bebé comienzan a desarrollarse temprano y, por lo general, siempre estarán presentes antes de que el bebé tenga 3 meses.
Los médicos buscan los siguientes signos para hacer un diagnóstico:
- desgarro excesivo
- un charco hinchado de lágrimas debajo de los ojos, conocido como lago lagrimal
- secreción de los ojos
- ojos o pestañas con costra después de dormir
- un bulto cerca del rabillo del ojo
- hinchazón, dolor o sensibilidad cerca de la nariz
Un médico examinará minuciosamente al bebé para asegurarse de que otras afecciones no sean responsables de los síntomas.
Controlarán la presión ocular y la salud de la córnea en caso de glaucoma infantil. También buscarán enrojecimiento, hinchazón e irritación de los ojos para descartar conjuntivitis.
Tratamiento
La mayoría de los conductos lagrimales bloqueados se resuelven sin tratamiento durante el primer año de vida del bebé.
Como resultado, los médicos tienden a recomendar solo un tratamiento conservador, mientras monitorean cuidadosamente la salud del bebé. Esto debería eliminar el 90 por ciento de las obstrucciones del conducto lagrimal.
Métodos de tratamiento conservadores.
Algunos médicos pueden sugerir masajear el saco lagrimal. Esto fuerza el fluido a través de los conductos lagrimales que pueden eliminar los bloqueos.
También pueden recetar gotas oftálmicas antibióticas si los ojos del bebé están produciendo mucha secreción, pero esto no solucionará el problema subyacente.
Métodos de tratamiento más invasivos
En algunos casos, un conducto lagrimal no se desbloqueará con el tiempo y el tratamiento conservador, y el médico deberá utilizar un método de tratamiento diferente.
El método más común es el sondaje quirúrgico, en el que el médico inserta un instrumento médico en el conducto lagrimal para eliminar la obstrucción. Para los bebés de 6 meses o menos, el sondaje quirúrgico generalmente se llevará a cabo en el consultorio del médico sin anestesia. Los niños un poco mayores tienen más probabilidades de someterse al procedimiento en un quirófano bajo anestesia general.
El procedimiento generalmente toma alrededor de 10 minutos y tiene una tasa de éxito del 80 por ciento.
Si el sondaje no resuelve por completo el problema, las opciones de tratamiento adicionales pueden incluir:
- usando stents para mantener los conductos abiertos
- usando un catéter de globo para ensanchar los conductos
- alterar la estructura de la cavidad nasal para promover el drenaje
- usando una endoscopia nasal para eliminar los quistes del conducto lagrimal
- usar cirugía para establecer una nueva abertura en la cavidad nasal, aunque esto es más común en adultos
Pueden pasar hasta 7 días después de cualquiera de estos procedimientos para que los síntomas del bebé comiencen a mejorar.
Remedios caseros
Use una bola de algodón empapada en agua para limpiar la costra del ojo.Remoje un paño suave o una bola de algodón en agua tibia y utilícelo con cuidado para limpiar la costra y la secreción seca de los ojos del bebé.
Esto es particularmente importante antes de usar gotas oftálmicas antibióticas recetadas.
Limpie siempre el ojo del bebé desde adentro, cerca de la nariz, hacia afuera. Use una bola de algodón nueva o una parte diferente del paño para cada ojo si es necesario.
Masaje
El masaje es el tratamiento en el hogar que los médicos recomiendan con mayor frecuencia para un conducto lagrimal bloqueado. Un oftalmólogo o un médico pueden mostrar a las personas cómo utilizar este procedimiento en ellas mismas o en su hijo para abrir el conducto lagrimal.
La Academia Estadounidense de Oftalmología sugiere masajear los conductos con 10 golpes dos veces al día. Para un bebé, es mejor realizar el masaje del conducto lagrimal bloqueado durante el cambio de pañal.
Los expertos recomiendan con frecuencia usar un hisopo de algodón en lugar de un dedo, porque el tamaño más pequeño del hisopo hace que sea más fácil apuntar al saco lagrimal.
Compresas calientes
Las personas pueden colocar compresas calientes, como un paño húmedo y tibio, suavemente sobre los ojos para ayudar a aliviar los síntomas de un conducto lagrimal bloqueado.
Cuando ver a un doctor
La Asociación Americana de Optometría recomienda un examen ocular completo para todos los bebés a los 6 meses, incluso si no hay problemas evidentes. Si existen preocupaciones sobre la salud de los ojos de un bebé, es recomendable consultar a un médico de inmediato.
El tratamiento oportuno de un bebé con un conducto lagrimal bloqueado, incluso el tratamiento conservador, puede reducir el riesgo de infección y la necesidad de procedimientos más invasivos en una fecha posterior.
Quitar
Los conductos lagrimales bloqueados en los bebés generalmente se resuelven solos.
Es esencial consultar a un médico si un bebé tiene los ojos muy llorosos, secreción o parece estar lagrimeando una cantidad inusual sin una causa aparente. Además, como un conducto lagrimal bloqueado en un bebé no suele causarle dolor, es aconsejable buscar consejo médico si el bebé muestra signos de malestar o es inusualmente sensible a la luz.