Causas y consejos para afrontar el dolor crónico de rodilla
El dolor crónico de rodilla es un problema común. Puede suceder por varias razones y puede dificultar caminar y funcionar en la vida cotidiana.
La articulación de la rodilla es compleja y diversos factores pueden provocar daños y dolor.
Cuando los componentes de la rodilla no funcionan correctamente, pueden producirse dolor, inflamación y otros síntomas. Los problemas pueden resultar de un trauma o una condición médica.
Siga leyendo para obtener más información sobre las causas del dolor de rodilla y qué pueden hacer las personas para aliviarlo.
La articulación de la rodilla
El dolor crónico de rodilla puede tener una variedad de causas, incluidos accidentes y algunas condiciones de salud.Para comprender qué causa el dolor de rodilla, puede ser útil saber qué forma la articulación de la rodilla.
La rodilla es la articulación donde se conectan el fémur, la tibia y la rótula (rótula). También involucra cartílagos, ligamentos, meniscos y tendones.
El cartílago es una sustancia resbaladiza que se encuentra en los extremos de los huesos de la rodilla. Permite que los huesos se froten o pasen suavemente unos sobre otros a medida que la pierna se dobla y se endereza.
Los meniscos actúan como cojines entre el fémur y la tibia que también actúan como amortiguadores.
Los ligamentos mantienen unidos los huesos y dan estabilidad a la rodilla. El daño a los ligamentos puede resultar de un uso excesivo, como en los deportes, o de una lesión traumática.
Los tendones son los tejidos conectivos que unen los músculos de la pierna a los huesos que controlan.
Cuando todas estas piezas funcionan juntas, la rodilla funciona como debería y la persona puede moverse libremente.
Causas: trauma
Caer desde una altura, recibir un golpe directo en la rodilla, hacer un cambio brusco de dirección o realizar movimientos repetitivos durante el entrenamiento deportivo son causas de lesiones traumáticas de rodilla.
Estos pueden conducir a:
- dislocación de la rótula
- una fractura de la rótula, el fémur o la tibia
- ligamento roto
- desgarro de menisco
Las lesiones pueden ocurrir si una persona:
- no calienta antes o después del ejercicio o trabaja demasiado en una actividad
- participa en algunos deportes, especialmente sin usar equipo de protección
- tiene un accidente de tráfico o una caída
Los accidentes, las caídas y las actividades físicas son causas comunes de lesiones traumáticas de rodilla. Pueden someter la rodilla a una tensión extrema. Si la rodilla no se cura adecuadamente, puede producirse dolor crónico.
Los problemas comunes incluyen fracturas de huesos, rótulas dislocadas y ligamentos desgarrados.
Causas: Médico
El dolor de rodilla puede ser el resultado a largo plazo de un accidente o puede deberse a una afección médica, como la artritis.Las afecciones médicas que provocan dolor de rodilla son las siguientes:
- trastornos degenerativos del tejido, como osteoartritis
- infecciones
- obesidad
- enfermedad autoinflamatoria, como artritis reumatoide
- tendinitis, una inflamación de un tendón que provoca dolor al subir escaleras
- bursitis, una inflamación resultante del uso excesivo
- condromalacia rotuliana o daño al cartílago debajo de la rótula
- gota, un tipo de artritis
- un quiste de Baker, cuando el líquido se acumula detrás de la rodilla
- un tumor, ya sea benigno o maligno en la rodilla
Siga leyendo para obtener más detalles sobre algunas de estas condiciones.
Obesidad
La obesidad y el exceso de peso son los principales contribuyentes al dolor crónico de rodilla.
Entre 1971 y 2004, la incidencia de dolor de rodilla aumentó en un 65 por ciento en los Estados Unidos, según un estudio publicado en 2011 en el Annals of Internal Medicine. Los investigadores dicen que esto se debe principalmente al aumento de la obesidad.
Gota
La gota es un trastorno metabólico. Las personas con gota pueden experimentar dolor de rodilla, porque la gota hace que se acumulen cristales de ácido úrico en las articulaciones. El resultado puede ser una inflamación dolorosa que también puede afectar la forma en que se mueve la rodilla.
Trastornos degenerativos del tejido.
La osteoartritis (OA) es una afección crónica común de las articulaciones. Es una enfermedad degenerativa, provocada por el “desgaste” de las articulaciones con el paso del tiempo.
Los síntomas comunes son dolor y rigidez después de largos períodos de descanso. Las rodillas también pueden hincharse después de una actividad prolongada.
La osteoporosis es otro trastorno común. El hueso se vuelve más delgado, lo que da como resultado daños en el cartílago y los tejidos de conexión en la rodilla. Esto puede aumentar la probabilidad de que se produzca una fractura.
Infección bacteriana
Las infecciones bacterianas, como la celulitis, pueden causar dolor repentino en la rodilla. La celulitis ocurre cuando las bacterias que normalmente se encuentran en la superficie de la piel se abren paso por debajo de la superficie protectora de la piel.
Sin tratamiento, la celulitis alrededor de la rodilla puede causar una infección en la articulación, lo que resulta en enrojecimiento, hinchazón, dolor y rigidez.
Con el tiempo, puede desarrollarse un dolor crónico de rodilla.
Causas autoinflamatorias
La artritis reumatoide (AR) es el trastorno del tejido conectivo más común que causa dolor de rodilla.
Es una enfermedad autoinflamatoria, en la que el sistema inmunológico del cuerpo ataca sus propios tejidos. En el caso del dolor de rodilla, la AR ataca los tejidos de la rodilla.
Los síntomas incluyen dolor, inflamación de las articulaciones, fatiga, fiebre y pérdida del apetito.
Factores de riesgo
Algunos factores del estilo de vida pueden aumentar el riesgo de dolor de rodilla.
Trauma: Comenzar la actividad física sin estirar adecuadamente primero puede aumentar el riesgo de una lesión traumática de rodilla. Las personas que practican deportes intensos, como el baloncesto y el fútbol, tienen un mayor riesgo de sufrir lesiones traumáticas.
Gota: trastornos como la gota pueden ser causados por elecciones de estilo de vida o por factores genéticos. El consumo excesivo de alcohol, la obesidad y los factores dietéticos pueden contribuir.
Trastornos degenerativos: a menudo ocurren con el envejecimiento, aunque existen otros factores. El riesgo de osteoporosis aumenta con la edad, genes específicos, falta de ejercicio y factores dietéticos.
Obesidad: esto aumenta el riesgo de OA, especialmente en las articulaciones grandes como las rodillas. El exceso de peso puede ejercer presión sobre las rodillas y provocar dolor e inflamación.
Infecciones bacterianas: la celulitis puede ocurrir en una persona que tiene un sistema inmunológico debilitado, afecciones de la piel, hinchazón prolongada en brazos y piernas y obesidad, o si usa medicamentos que requieren agujas.
Trastornos del tejido conectivo: los factores de riesgo de AR incluyen antecedentes familiares de AR, tener más de 40 años, tabaquismo y obesidad. Las mujeres también tienen más probabilidades de desarrollar AR que los hombres.
Otros posibles factores del dolor de rodilla incluyen la edad, el uso excesivo de las articulaciones y los factores genéticos.
Hacer ejercicio y seguir una dieta saludable durante toda la vida puede ayudar a reducir el riesgo de muchos de estos problemas.
Tratamiento
Según la causa del problema, el médico puede recomendar:
- medicamentos para aliviar el dolor u otras drogas
- un plan de ejercicios, que puede incluir ejercicio de bajo estrés
- descansando la rodilla
- un soporte para las rodillas
- cirugía
Los analgésicos incluyen medicamentos antiinflamatorios que reducirán el dolor y la hinchazón.
Consejos
Cuidar el cuerpo y elegir un estilo de vida saludable a menudo puede ayudar a reducir el riesgo de dolor crónico de rodilla.
Estilo de vida
Los consejos para reducir el riesgo de dolor crónico de rodilla y mejorar las perspectivas de problemas de rodilla existentes incluyen:
- reducir la ingesta de alcohol
- dejar de fumar
- mantener un peso saludable
La obesidad es un factor de riesgo para muchos de los trastornos que causan dolor crónico de rodilla. Mantener el peso corporal bajo control puede reducir en gran medida el riesgo de dolor crónico de rodilla.
Ejercicio
El ejercicio moderado regular puede reducir el riesgo, pero el calentamiento es esencial.El ejercicio reduce directamente el riesgo de muchas enfermedades, incluidas las enfermedades cardíacas, el cáncer, la diabetes, la presión arterial alta, la depresión, la obesidad y la osteoporosis.
Las actividades que fortalecen las rodillas pueden ayudar a reducir los síntomas del dolor de rodilla si se desarrolla OA.
Los ejercicios de bajo estrés que pueden ayudar a mejorar o prevenir el dolor de rodilla incluyen:
- natación
- ciclismo
- caminando
Dependiendo de la causa del dolor de rodilla y del estado de salud de la persona, un médico puede aconsejarle qué tipo de ejercicio ayudará y qué tan intenso debe ser el ejercicio.
Durmiendo
Algunos tipos de dolor, por ejemplo, OA, pueden empeorar por la noche. Los consejos para dormir mejor por la noche incluyen:
- encontrar una posición cómoda, posiblemente con una almohada entre las piernas
- utilizando un antiinflamatorio de larga duración, por ejemplo, uno que sea eficaz durante 12 horas
- Evitar el alcohol y la cafeína, ya que pueden interrumpir el sueño.
- mantener una buena higiene del sueño, con horarios regulares para acostarse y levantarse
- Evitar los somníferos, ya que las personas necesitan una dosis más alta si los usan con regularidad.
- hacer ejercicio de bajo impacto para ayudar tanto con el dolor como con el sueño
- usando un colchón firme, posiblemente con una almohadilla de espuma en la parte superior para ayudar a distribuir su peso
Otros sintomas
Además del dolor de rodilla, una persona también puede tener:
- debilidad de la rodilla e incapacidad para pararse correctamente o estirar completamente la rodilla
- sonidos de estallido cuando la rodilla se flexiona o se endereza
- hinchazón y rigidez alrededor de la rodilla
- enrojecimiento o calor en toda la rodilla
Éstos dependerán de la causa.
Dado que muchas causas de dolor de rodilla pueden provocar los mismos síntomas, cualquier persona que tenga un dolor de rodilla que no desaparece o que tenga un dolor intenso debe consultar a un médico.
Quitar
El dolor de rodilla puede ocurrir por una amplia variedad de razones. Cualquier persona que experimente un dolor persistente en la rodilla debe consultar a un médico.
El médico preguntará sobre los síntomas, realizará un examen físico y también puede sugerir pruebas de imagen como una radiografía o una resonancia magnética. Después de diagnosticar la causa, discutirán las opciones de tratamiento.
El tratamiento adecuado puede evitar que un problema de rodilla repentino o a corto plazo se convierta en crónico o a largo plazo.