Las bacterias intestinales impulsan la grasa del vientre, pero ¿son los genes o la dieta los culpables?
Sabemos que nuestra microbiota intestinal juega un papel crucial en la regulación de nuestra salud en general, particularmente nuestras reservas de grasa. Pero, ¿en qué medida los procesos que influyen en la acumulación de grasa están determinados por factores genéticos y ambientales, como la dieta?
El exceso de peso en la cintura está relacionado con la actividad de nuestras bacterias intestinales. Pero, ¿esa actividad se debe a nuestro perfil genético o nuestras elecciones dietéticas?Una cantidad cada vez mayor de evidencia apunta ahora a la importancia de las colecciones de bacterias que se encuentran en nuestros intestinos, a menudo conocidas como la "microbiota intestinal", en varios aspectos de nuestro bienestar.
Una revisión incluso llama a las bacterias intestinales "el órgano olvidado", ya que son muy activas y sus procesos químicos influyen en el metabolismo del cuerpo de muchas formas.
Por esta razón, los investigadores del King's College de Londres en el Reino Unido decidieron observar más de cerca qué influye en la actividad de las bacterias intestinales, especialmente en lo que se refiere al aumento de peso y la distribución del peso en el cuerpo.
Para ello, los científicos analizaron el metaboloma fecal (la colección de moléculas o "metabolitos" producidos por ciertos procesos metabólicos) de los gemelos, con el fin de comprender cómo los procesos químicos que tienen lugar en el intestino afectan la distribución de la grasa. , y particularmente su acumulación alrededor de la cintura.
El exceso de grasa en la cintura se considera un factor de riesgo para el desarrollo de afecciones metabólicas, incluidas la obesidad y la diabetes.
A través de su investigación, la investigadora principal Cristina Menni y su equipo lograron armar una base de datos que enumeraba qué bacterias intestinales estaban vinculadas con qué metabolitos. Además, respondieron a la pregunta: "¿Los procesos químicos en el intestino están más influenciados por nuestro perfil genético o por nuestras elecciones dietéticas?"
Sus hallazgos ahora se han publicado en la revista. Genética de la naturaleza.
"Este estudio realmente ha acelerado nuestra comprensión de la interacción entre lo que comemos, la forma en que se procesa en el intestino y el desarrollo de grasa en el cuerpo, pero también la inmunidad y la inflamación", dice Menni.
“Al analizar el metaboloma fecal, hemos podido obtener una instantánea tanto de la salud del cuerpo como de los complejos procesos que tienen lugar en el intestino”, agrega.
Mecanismos intestinales impulsados por la dieta, no por los genes
Menni y sus colegas inicialmente recolectaron muestras de 786 gemelos, el 93.4 por ciento de los cuales eran mujeres, reclutados mediante el registro TwinsUK, y analizaron 1,116 metabolitos. Los resultados del análisis inicial luego se replicaron en un grupo adicional de 230 gemelos (98,3 por ciento de mujeres).
Los análisis revelaron que solo el 17,9 por ciento de los procesos intestinales están influenciados por factores genéticos. Por el contrario, el 67,7 por ciento de estos mecanismos fueron impulsados por factores ambientales, en particular la dieta.
Estos hallazgos, señalan los investigadores, son alentadores, porque sugieren que podemos alterar nuestros procesos intestinales y dirigirlos en una dirección más saludable, evitando la acumulación de grasa en áreas como la cintura simplemente haciendo cambios en nuestra dieta. .
"Este emocionante trabajo en nuestros gemelos muestra la importancia para nuestra salud y peso de los miles de químicos que los microbios intestinales producen en respuesta a los alimentos", dice el coautor del estudio, el profesor Tim Spector, director del Grupo de Investigación de Gemelos del King's College de Londres.
Los resultados del estudio son "buenas noticias"
Además, los investigadores han reunido una base de datos que describe los metabolomas fecales, así como qué bacterias intestinales interactúan con qué tipos de sustancias químicas. Este conocimiento, esperan, pueda ayudar a futuras investigaciones con el objetivo de comprender mejor cómo nuestra microbiota intestinal influye en la salud.
Y los próximos estudios, añaden los investigadores, incluso pueden aislar sustancias químicas que podrían alterar los procesos químicos en nuestras entrañas para mejor. Como señala el profesor Spector, "Saber que [los procesos químicos en el intestino] están controlados en gran medida por lo que comemos en lugar de nuestros genes es una gran noticia y abre muchas formas de usar los alimentos como medicina".
“En el futuro […] los productos químicos [que ayudan a mejorar nuestra salud metabólica] podrían incluso usarse en inodoros inteligentes o como papel higiénico inteligente”.
Prof. Tim Spector
El primer autor del estudio, Jonas Zierer, también explica que comprender qué factores pueden alterar la actividad de nuestra microbiota intestinal es de gran ayuda en la búsqueda cuando se trata de desarrollar mejores terapias para prevenir afecciones como la obesidad y la diabetes.
"Este nuevo conocimiento", explica Zierer, "significa que podemos alterar el entorno intestinal y enfrentar el desafío de la obesidad desde un nuevo ángulo que está relacionado con factores modificables como la dieta y los microbios en el intestino".
"Esto es emocionante, porque a diferencia de nuestros genes y nuestro riesgo innato de desarrollar grasa alrededor del abdomen, los microbios intestinales pueden modificarse con probióticos, con medicamentos o con dietas ricas en fibra", dice.