La dieta a base de plantas reduce el riesgo de insuficiencia cardíaca en más del 40 por ciento

Una nueva investigación encuentra que seguir una dieta rica en frutas, verduras y pescado puede reducir el riesgo de insuficiencia cardíaca en un 41 por ciento. Por el contrario, una dieta rica en grasas, alimentos fritos, carne procesada y bebidas azucaradas puede aumentar el riesgo de esta afección.

Agregar más verduras a nuestro plato podría mantener a raya la insuficiencia cardíaca.

La insuficiencia cardíaca ocurre cuando el corazón no puede suministrar suficiente sangre y oxígeno a los órganos principales del cuerpo.

La afección afecta a aproximadamente 5,7 millones de personas en los Estados Unidos y aproximadamente a 26 millones de personas en todo el mundo.

Algunos expertos predicen que la insuficiencia cardíaca se volverá cada vez más prevalente en todo el mundo, lo que los ha llevado a referirse a ella como una "pandemia global".

Sin embargo, la evidencia emergente sugiere que una dieta que consista principalmente en frutas y verduras puede prevenir las enfermedades cardiovasculares. Ahora, un nuevo estudio refuerza esta idea.

La Dra. Kyla Lara, becaria de cardiología de la Clínica Mayo en Rochester, MN, y sus colegas, han examinado las asociaciones entre cinco patrones dietéticos principales y el riesgo de insuficiencia cardíaca entre personas sin antecedentes conocidos de enfermedad cardíaca.

La Dra. Lara y su equipo publicaron los resultados de su estudio en el Revista del Colegio Americano de Cardiología.

El efecto de las dietas sobre la insuficiencia cardíaca.

Los investigadores examinaron los datos disponibles del estudio Reasons for Geographic and Racial Differences in Stroke (REGARDS). Es decir, observaron los patrones dietéticos de 16.068 personas blancas y negras que tenían un promedio de 45 años.

Los participantes respondieron una encuesta de 150 ítems, que incluía 107 alimentos. Los investigadores agruparon los alimentos en cinco patrones dietéticos:

  • Dietas de "conveniencia", que consistían en platos con mucha carne, pasta, pizza y comida rápida
  • Dietas "a base de plantas", que consisten principalmente en verduras, frutas, frijoles y pescado
  • Dietas "sureñas", que comprenden una cantidad significativa de alimentos fritos, carne procesada, huevos, grasas agregadas y bebidas azucaradas.
  • Dietas de “alcohol / ensaladas”, que incluían mucho vino, licor, cerveza, verduras de hoja verde y aderezos para ensaladas.

El Dr. Lara y su equipo siguieron a los participantes durante un promedio de 8,7 años, tiempo durante el cual 363 personas pasaron tiempo en el hospital por insuficiencia cardíaca por primera vez.

De estos, 133 personas tenían insuficiencia cardíaca con fracción de eyección conservada y 157 tenían insuficiencia cardíaca con fracción de eyección reducida. El primero se refiere a una forma de insuficiencia cardíaca en la que la fracción de eyección, una medida de qué tan bien bombea sangre el corazón, es "normal" o "conservada".

Las dietas a base de plantas reducen el riesgo de insuficiencia cardíaca

En general, los investigadores encontraron que seguir la dieta sureña aumentaba el riesgo de hospitalización debido a insuficiencia cardíaca en un 72 por ciento.

Pero cuando los investigadores ajustaron el índice de masa corporal (IMC), "circunferencia de la cintura, hipertensión, dislipidemia, diabetes mellitus, fibrilación auricular y enfermedad renal crónica", esta asociación dejó de ser estadísticamente significativa.

Esto podría significar que la dieta sureña aumenta el riesgo de insuficiencia cardíaca al aumentar la obesidad y la grasa abdominal, explican los investigadores.

Es importante destacar que los investigadores encontraron que el riesgo de hospitalizaciones por insuficiencia cardíaca fue un 41 por ciento menor entre las personas que se adhirieron a la dieta a base de plantas.

Finalmente, los investigadores no encontraron asociaciones estadísticamente significativas entre el riesgo de insuficiencia cardíaca y los otros tres patrones dietéticos.

“La adherencia a un patrón dietético basado en plantas se asoció inversamente con el riesgo de incidencia [insuficiencia cardíaca], mientras que el patrón dietético del Sur se asoció positivamente con el riesgo de incidencia [insuficiencia cardíaca]”, concluyen los investigadores, que también describen algunas fortalezas y limitaciones de su estudio.

Los investigadores dicen que la muestra de estudio socioeconómica y demográficamente diversa fortaleció las asociaciones. Sin embargo, los participantes del estudio pueden haber estimado erróneamente sus ingestas dietéticas, lo que puede haber sesgado los resultados.

Además, los investigadores examinaron las dietas de los participantes solo al comienzo del estudio, y estos hábitos dietéticos pueden haber cambiado durante el período de estudio.

En un editorial vinculado, el Dr. Dong Wang, investigador de Harvard T.H. Chan School of Public Health en Boston, MA, comenta sobre la importancia de los hallazgos: "Este estudio representa un importante paso adelante en el establecimiento de una sólida base de pruebas para la prevención dietética de la insuficiencia cardíaca".

"La necesidad de estrategias de prevención de la insuficiencia cardíaca basadas en la población es fundamental [...] Estos hallazgos respaldan una estrategia dietética basada en la población para reducir el riesgo de insuficiencia cardíaca incidente".

Dr. Kyla Lara

none:  cuidadores - atención domiciliaria audición - sordera menopausia