¿Qué causa un lunar sangrante?
Un lunar puede sangrar si queda atrapado en algo y se rompe. Si bien esto puede doler, generalmente no es motivo de preocupación. En casos raros, un lunar sangra sin motivo aparente y esto puede ser un signo de cáncer de piel.
Es común que los adultos tengan entre 10 y 40 lunares. Las personas con piel más clara tienden a tener más lunares que aquellas con piel más oscura.
Los lunares pueden cambiar a medida que una persona envejece. Algunos se volverán más oscuros o más claros y muchos lunares crecen. Pueden aparecer en cualquier parte de la piel, desde el cuero cabelludo hasta las plantas de los pies e incluso debajo de las uñas.
La mayoría de los lunares son inofensivos, pero las personas deben revisarlos para detectar cambios, como sangrado, que puedan indicar melanoma.
En este artículo, aprenda por qué los lunares pueden sangrar y cuándo buscar tratamiento médico.
Causas
Un médico debe inspeccionar cualquier lunar que sangra sin motivo.
Los lunares elevados pueden engancharse en cosas, como joyas, y comenzar a sangrar. También pueden sentir picazón y una persona puede romperse la piel si se rasca con demasiada fuerza.
Un lunar sangrante puede ser doloroso, pero una persona generalmente puede tratar estas heridas menores en casa.
Sin embargo, si un lunar sangra sin motivo aparente, la persona debe consultar a un médico. Los lunares sangrantes, o lunares que parecen llagas abiertas, a veces pueden ser signos de melanoma.
Cuando ver a un doctor
Los melanomas son cánceres de piel que comienzan en las células de la piel que producen pigmento.
Las células cancerosas pueden parecer lunares o pueden desarrollarse a partir de lunares. Cuando se detectan y se tratan temprano, los melanomas casi siempre son curables.
Las personas pueden usar los “ABCDE” para monitorear lunares nuevos o existentes. Si alguno de los siguientes signos está presente, consulte a un médico para una evaluación profesional:
- Asimetría: Las dos mitades del lunar o peca no coinciden.
- Borde: el lunar o peca tiene un borde irregular, festoneado o mal definido.
- Color: el lunar contiene varios tonos de bronceado, marrón, negro, blanco, rojo o azul.
- Diámetro: los melanomas suelen tener más de 6 milímetros de diámetro cuando un médico los diagnostica. Sin embargo, pueden ser más pequeños.
- Evolución: si un lunar se ve diferente de los demás, o ha cambiado notablemente de tamaño, forma o color, puede indicar un melanoma.
Si un lunar sangra o supura, esto también puede indicar un melanoma. Otros síntomas incluyen:
- llagas que no curan
- enrojecimiento o hinchazón que se extiende fuera del borde de un lunar
- picazón, sensibilidad o dolor en un lunar
- cambios en la textura de un lunar
- visión borrosa, pérdida parcial de la vista o manchas oscuras en el iris del ojo
Tratamiento
Los primeros auxilios estándar para un lunar sangrante implican cubrir la herida con un apósito estéril y aplicar presión para detener el sangrado.
La mayoría de los lunares son inofensivos y no requieren tratamiento. Un médico puede extirpar un lunar sospechoso para analizarlo en busca de células cancerosas.
Algunas personas también desean eliminar los lunares que son molestos o incómodos.
Un dermatólogo puede extirpar un lunar mediante escisión quirúrgica o afeitado quirúrgico.
Durante la escisión quirúrgica, el médico adormece el área, corta el lunar y cierra la herida con puntos de sutura.
Un afeitado quirúrgico puede eliminar pequeños lunares. Después de adormecer el área, el médico usa una cuchilla pequeña para quitar la parte del lunar que se eleva por encima del resto de la piel.
Algunas personas intentan eliminar los lunares en casa, pero la Asociación Estadounidense de Dermatólogos advierte contra esto por tres razones:
- Si el lunar contiene cáncer de piel, algunas de las células cancerosas pueden permanecer en la piel e incluso diseminarse.
- Afeitarse o cortarse un lunar puede desfigurar la piel y causar cicatrices.
- La extracción de un lunar sin equipo estéril y en condiciones no quirúrgicas puede provocar una infección.
Prevención
Tomar medidas para proteger la piel de la luz solar directa puede ayudar a reducir el riesgo de cáncer de piel.
La exposición a los dañinos rayos ultravioleta (UV) del sol causa la mayoría de los cánceres de piel. Los siguientes son consejos generales para prevenir el cáncer de piel:
- Permanezca a la sombra durante las horas más luminosas del día.
- Evite el bronceado al sol y nunca use camas de bronceado UV.
- Cúbrase del sol con un sombrero de ala ancha y anteojos de sol que bloqueen los rayos UV.
- Use un protector solar de amplio espectro (UVA / UVB) con un SPF de 15 o más todos los días.
- Use un protector solar de amplio espectro (UVA / UVB) resistente al agua con un FPS de 30 o más durante períodos prolongados de exposición al sol.
- Vuelva a aplicar el protector solar cada 2 horas e inmediatamente después de nadar o sudar excesivamente.
- Mantenga a los recién nacidos fuera del sol.
panorama
La mayoría de los lunares sangrantes son el resultado de cortes o desgarros superficiales. Una persona puede tratarlos en casa aplicando presión y un vendaje.
Si un lunar sangra sin motivo aparente o comienza a verse como una llaga abierta, comuníquese con un médico para una evaluación.
La tasa de supervivencia a 5 años para el melanoma en etapa muy temprana que no se ha diseminado es del 99 por ciento. Esto significa que casi todas las personas con este tipo de cáncer de piel siguen vivas 5 años después del diagnóstico.
Es esencial controlar los lunares en busca de signos de cáncer y hablar con un médico sobre cualquier inquietud.