Qué saber sobre las venas de la frente
Las venas abultadas pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo, incluida la frente. Las venas pueden expandirse debido a la presión o al estrés. Los cambios en la piel asociados con el envejecimiento pueden hacer que las venas de la frente parezcan más grandes de lo que son.
Los factores genéticos o la edad pueden influir en la aparición de venas grandes en la frente. La piel se vuelve más delgada a medida que el cuerpo envejece, lo que puede hacer que las venas parezcan más pronunciadas o más grandes de lo que son.
Las venas agrandadas pueden aparecer en el centro de la frente o en los lados de la cara, cerca de las sienes. Las venas abultadas de la frente rara vez indican una emergencia médica.
Siga leyendo para obtener más información sobre las venas abultadas de la frente, incluidas las causas y los tratamientos. Las posibles causas de las venas de la frente abultadas incluyen:
Presión
Reír, estornudar y gritar pueden aumentar la presión en la cabeza.
Un aumento de presión puede hacer que las venas sobresalgan a través de la piel. Los factores que aumentan la presión en el cuello y la cabeza incluyen:
- risa
- estornudar
- gritando
- llorando
- vomitando
- ejercitarse
- dolores de cabeza
Una vena de la frente abultada puede desarrollarse a partir de un dolor de cabeza por tensión. Los dolores de cabeza tensionales son el tipo más común de dolor de cabeza, que se produce debido a la tensión en los músculos de los hombros, el cuero cabelludo o la mandíbula.
El embarazo
Los cambios hormonales durante el embarazo pueden conducir a un mayor volumen de sangre, lo que puede resultar en venas agrandadas.
Los niveles de progesterona aumentan durante el embarazo. La progesterona espesa el revestimiento del útero y prepara el útero para recibir un óvulo fertilizado. La progestina también dilata o expande los vasos sanguíneos, lo que puede hacer que parezcan más grandes debajo de la piel.
Según los Institutos Nacionales de Salud (NIH), los niveles de progesterona son diez veces más altos en las mujeres embarazadas que en las que no lo están.
Arteritis temporal
La arteritis temporal, o arteritis de células gigantes, es un tipo de vasculitis que afecta las venas cercanas a las sienes. La vasculitis se refiere a la inflamación de los vasos sanguíneos.
La arteritis temporal causa inflamación en las arterias temporales y los vasos sanguíneos circundantes. Esto puede provocar venas abultadas que se extienden desde las sienes hasta la mitad de la frente.
Otros síntomas de la arteritis temporal incluyen:
- dolores de cabeza intensos y punzantes
- dolor o sensibilidad cerca de las sienes, la boca o la mandíbula
- hinchazón del cuero cabelludo
- visión borrosa o doble
- pérdida de apetito
- transpiración
- fiebre
exposición al sol
La exposición prolongada al sol puede hacer que las venas cercanas a la superficie de la piel se dilaten.Pasar demasiado tiempo al sol puede dañar el tejido de la piel y las venas.
El calor del sol hace que las venas se dilaten para que puedan regular la temperatura interna del cuerpo. Sin embargo, las venas dilatadas cerca de la superficie de la piel tienen el potencial de estallar o romperse, lo que resulta en arañas vasculares.
Las arañas vasculares se refieren a pequeñas líneas rojas, azules o púrpuras que aparecen justo debajo de la superficie de la piel. Estas líneas indican venas rotas y pueden desarrollarse en cualquier parte del cuerpo, incluida la cara.
¿Por qué podría aparecer o hacerse visible una nueva vena?
Una vena abultada puede aparecer repentinamente si alguien pierde una cantidad significativa de peso. Las personas con menos grasa corporal pueden tener venas más prominentes. El adelgazamiento de la piel debido al aumento de peso también podría explicar la aparición de nuevas venas abultadas.
Los cambios hormonales y la presión arterial alta también pueden provocar la aparición repentina de las venas de la frente.
Según el Instituto Estadounidense del Estrés, tanto el estrés físico como el mental pueden elevar significativamente la presión arterial.
¿Es necesario un tratamiento?
En la mayoría de los casos, las venas de la frente no requieren tratamiento. Las personas a las que no les gusta la apariencia de las venas de la frente pueden optar por someterse a procedimientos que reducen su visibilidad.
Los tratamientos para las venas de la frente incluyen:
- Electrocirugía: este procedimiento utiliza corrientes eléctricas de alta frecuencia para cortar o destruir vasos sanguíneos.
- Escleroterapia: los médicos utilizan este procedimiento médico estándar para tratar las varices y las arañas vasculares. No requiere cirugía. Durante la escleroterapia, un médico inyectará una solución salina directamente en una vena, provocando su colapso.
- Cirugía con láser endovenoso: este procedimiento utiliza un láser para cerrar o encoger las venas. El calor del láser destruye el tejido que recubre las paredes de los vasos sanguíneos. El cuerpo absorberá naturalmente el tejido muerto.
Cuando ver a un doctor
Si los dolores de cabeza y los mareos acompañan a las venas grandes de la frente, una persona debe hablar con su médico.Aunque las venas grandes de la frente no indican una emergencia médica, es posible que las personas deseen hablar con un médico si experimentan:
- dolores de cabeza
- mareo
- visión borrosa o doble
- dolor o sensibilidad cerca de las sienes, la boca o la mandíbula
Incluso si alguien no experimenta síntomas, aún puede consultar a un médico sobre las posibles opciones de tratamiento para las venas grandes de la frente.
Las personas deben considerar cuidadosamente todos los beneficios y riesgos asociados con los tratamientos quirúrgicos y no quirúrgicos antes de tomar una decisión.
Resumen
Varios factores pueden contribuir a la aparición de venas abultadas en la frente. Estos pueden incluir razones naturales, como la genética, el envejecimiento y la exposición al sol. Una afección médica subyacente que afecta el sistema cardiovascular, como la vasculitis, también puede causar venas grandes en la frente.
Las venas grandes de la frente no requieren tratamiento a menos que a alguien no le guste su apariencia. Las personas pueden elegir entre una variedad de procedimientos quirúrgicos y no quirúrgicos para reducir la apariencia de las venas de la frente.
Las personas deben pedirle a un profesional médico capacitado que revise los posibles riesgos y beneficios asociados con cualquier tratamiento.