¿Qué es el cáncer de endometrio?
El cáncer de endometrio comienza en la capa de células que forman el revestimiento del útero, llamada endometrio. Es un cáncer de útero o de útero.
La mayoría de los cánceres de útero comienzan como cáncer de endometrio. Otro tipo de cáncer, el sarcoma uterino, comienza en los músculos y tejidos del útero. El cáncer de endometrio y el sarcoma uterino suelen tener diferentes tratamientos.
El cáncer de útero es el cáncer ginecológico más común en los Estados Unidos. En 2020, el Instituto Nacional del Cáncer estima que habrá aproximadamente 65,620 diagnósticos de cáncer de endometrio y 12,590 muertes por esta enfermedad en los EE. UU.
Síntomas
Crédito de la imagen: Keith Brofsky / Getty ImagesLos primeros síntomas incluyen sangrado inusual, como después de la menopausia o entre períodos.
El cáncer de endometrio también puede causar dolor en el área pélvica, con menos frecuencia durante las relaciones sexuales. Algunas personas también experimentan dolor al orinar o dificultad para vaciar la vejiga.
A medida que avanza el cáncer, puede haber:
- una sensación de masa o pesadez en el área pélvica
- pérdida de peso involuntaria
- fatiga
- náusea
- dolor en varias partes del cuerpo, incluidas las piernas, la espalda y el área pélvica
Estos síntomas también pueden deberse a otros problemas de salud no cancerosos, como fibromas, endometriosis, hiperplasia endometrial y pólipos en el revestimiento del útero.
Es importante descartar el cáncer de endometrio si otra afección está causando síntomas similares.
Puesta en escena
Si las pruebas detectan cáncer, el médico evaluará el grado del tumor para ver qué tan rápido se están dividiendo las células y qué tan rápido es probable que crezca el cáncer.
Es más probable que un tumor de grado superior crezca rápidamente y se disemine a otras partes del cuerpo.
El mejor curso de tratamiento depende, en parte, del estadio o de la extensión del cáncer.
Los médicos pueden utilizar las siguientes definiciones al clasificar el cáncer de endometrio:
- Etapa 0: las células cancerosas permanecen donde comenzaron, en la superficie del revestimiento interno del útero.
- Etapa 1: el cáncer se ha diseminado a través del revestimiento interno del útero hasta el endometrio y posiblemente hasta el miometrio, la capa media de la pared uterina.
- Etapa 2: el tumor se ha diseminado al cuello uterino.
- Etapa 3: el tumor se ha diseminado a través del útero hasta el tejido cercano, incluida la vagina o un ganglio linfático.
- Etapa 4: el cáncer se ha diseminado a la vejiga o al intestino y posiblemente a otras áreas, como los huesos, el hígado o los pulmones.
Obtenga más información sobre cómo los médicos diagnostican y estadifican el cáncer.
Cuando el cáncer de endometrio se disemina desde el endometrio a otras partes del cuerpo, los médicos dicen que se ha "metastatizado".
A continuación, encontrará un mapa interactivo en 3D de las etapas del cáncer de endometrio. Explórelo con el mousepad o la pantalla táctil.
Tratamiento
El mejor enfoque de tratamiento depende de:
- la edad de la persona
- su salud en general
- el grado y el estadio del tumor
Las opciones incluyen cirugía, radioterapia, quimioterapia, terapia dirigida y terapia hormonal. Es importante que el médico describa todos estos tratamientos en detalle.
Cirugía
La cirugía generalmente implica una histerectomía, que consiste en la extirpación del útero, las trompas de Falopio y los ovarios.
Una persona que se somete a una histerectomía antes de la menopausia dejará de menstruar y no concebirá.
Después de la cirugía, una persona puede experimentar síntomas de la menopausia, como sofocos, sudores nocturnos y sequedad vaginal.
Radioterapia
La radioterapia utiliza rayos potentes para destruir las células cancerosas. Daña su ADN para que ya no puedan multiplicarse.
Si una persona recibe radioterapia externa, una máquina dirige la radiación a la pelvis y otras áreas con cáncer.
La braquiterapia, o radioterapia interna, consiste en colocar un pequeño dispositivo que contiene radiación en la vagina durante unos minutos a la vez.
Los médicos también pueden usar la radioterapia para:
- encoger un tumor antes de la cirugía, lo que facilita su extirpación
- eliminar las células cancerosas restantes después de la cirugía
- aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida, cuando no es posible extirpar el tumor
Efectos adversos
Los efectos secundarios de la radioterapia pueden incluir:
- quemaduras en el área afectada
- perdida de cabello
- fatiga
- náusea
- Diarrea
Una vez finalizado el tratamiento, los efectos secundarios suelen desaparecer.
Quimioterapia
La quimioterapia usa medicamentos para destruir las células cancerosas. Combinado con radioterapia, puede matar un tumor o eliminar cualquier célula que quede después de la cirugía.
También puede retrasar la progresión del cáncer en etapa tardía y prolongar la esperanza de vida.
Para las personas con cáncer de endometrio, los médicos generalmente administran quimioterapia por vía intravenosa, con intervalos entre sesiones de tratamiento para permitir que el cuerpo se recupere.
Efectos adversos
Los posibles efectos secundarios incluyen una reducción de las células sanguíneas sanas. Esto puede aumentar el riesgo de:
- magulladuras
- sangrado
- anemia
- fatiga
- infecciones
Cualquiera que experimente alguno de estos debe comunicarse con su médico.
La quimioterapia también puede causar:
- perdida de cabello
- problemas gastrointestinales
- poco apetito
- llagas en los labios y la boca
Con menos frecuencia, puede causar:
- hinchazón en las piernas y los pies
- dolor en las articulaciones
- problemas de equilibrio
- dificultades auditivas
- una erupción
- entumecimiento y hormigueo en las manos y los pies
Estos efectos adversos suelen desaparecer una vez finalizado el tratamiento.
Terapia dirigida
Este tipo de tratamiento utiliza sustancias que se dirigen a células cancerosas específicas.
Pueden hacer esto de la siguiente manera:
- producir anticuerpos que combaten las células cancerosas
- prevenir el crecimiento de los vasos sanguíneos que irrigan un tumor
- Bloquear señales que le dicen a las células que se reproduzcan excesivamente.
A diferencia de la radioterapia o la quimioterapia, los tratamientos dirigidos solo afectan a las células cancerosas, no a las células sanas. Por esta razón, es menos probable que causen efectos secundarios en todo el cuerpo.
Terapia hormonal
Algunas hormonas estimulan el crecimiento de las células cancerosas. La terapia hormonal para el cáncer bloquea o elimina estas hormonas.
La principal hormona involucrada en el tratamiento es la progestina. Otras opciones son el tamoxifeno (Nolvadex), un modulador del receptor de estrógeno, agonistas de la hormona liberadora de hormona luteinizante e inhibidores de la aromatasa.
Los efectos secundarios dependen del medicamento específico.
Los médicos generalmente recomiendan el tratamiento hormonal para las personas con cáncer de endometrio avanzado y también brindan quimioterapia.
Sin embargo, algunos investigadores han sugerido que puede ser adecuado para mujeres con cáncer en estadio temprano y tumores de bajo grado que deseen conservar su fertilidad.
Causas
Los médicos no saben qué causa el cáncer de endometrio.
El cáncer ocurre cuando los cambios genéticos hacen que las células comiencen a crecer incontrolablemente en lugar de morir en la etapa esperada de sus ciclos de vida.
La investigación sobre la causa de estos cambios genéticos está en curso, pero los expertos en salud saben que varios factores pueden aumentar el riesgo de desarrollar cáncer.
Factores de riesgo del cáncer de endometrio
Las personas expuestas a niveles altos de estrógeno pueden tener un mayor riesgo de cáncer de endometrio.
El riesgo es mayor para quienes:
- nunca he estado embarazada
- empieza a menstruar antes de los 12 años
- experimentar la menopausia después de los 55 años de edad
Otros factores incluyen:
- usando terapia hormonal con estrógeno solo después de la menopausia
- usando Nolvadex para prevenir o tratar el cáncer de mama
- haber tenido radioterapia previa en la pelvis
- tener antecedentes familiares de cáncer de útero
- tener síndrome de ovario poliquístico o SOP
- tener diabetes, obesidad, hipertensión u otros aspectos del síndrome metabólico
- tener hiperplasia endometrial
Signos tempranos
Es importante reconocer los primeros signos del cáncer de endometrio porque el tratamiento oportuno puede mejorar significativamente el pronóstico.
Los primeros signos incluyen:
- sangrado vaginal entre períodos
- períodos que son más pesados de lo habitual
- sangrado vaginal después de la menopausia
- flujo vaginal inusual que es acuoso o teñido de sangre
Cualquiera que tenga secreciones o períodos inusuales debe consultar a un médico.
Diagnóstico
Para diagnosticar este tipo de cáncer, un médico:
- revisar los síntomas
- preguntar acerca de los antecedentes médicos personales y familiares
- realizar un examen pélvico
- solicitar algunas pruebas, si creen que es necesario
El médico inspeccionará y palpará el cuello uterino, el útero, la vagina y los labios para detectar cualquier bulto o cambio de forma o tamaño.
Con una ecografía transvaginal, un médico puede evaluar el tamaño y la forma del útero y la textura y el grosor del endometrio y descartar otras afecciones.
Para realizar esta exploración, un profesional de la salud inserta un transductor en la vagina y evalúa las imágenes transmitidas en un monitor.
Los análisis de sangre también pueden revelar la presencia de células cancerosas.
Alternativamente, un médico puede usar histeroscopia, que consiste en insertar un endoscopio delgado en la vagina y el útero.
O pueden tomar una biopsia por aspiración, utilizando un tubo pequeño y flexible para tomar muestras de células y examinarlas con un microscopio.
Para controlar el progreso del cáncer de endometrio, un médico puede usar:
- una prueba de Papanicolaou
- una biopsia de ganglio linfático
- pruebas de imagen, como resonancias magnéticas
panorama
La tasa de supervivencia promedio a 5 años del cáncer de endometrio en general es de alrededor del 81,2%, según la Sociedad Estadounidense del Cáncer. Es del 95% si un médico diagnostica el cáncer en su etapa más temprana.
Para reducir el riesgo, el Instituto Nacional del Cáncer recomienda hacer ejercicio con regularidad, llevar una dieta saludable y equilibrada y evitar fumar.